Los índices de mentira

Abundan las personas que exponen en los medios de información explicaciones incorrectas acerca de los significados de los movimientos corporales. Lo que más nos llama la atención, como comunicólogos y profesionales de la comunicación, es que cómo estos seudo analistas aíslan la interpretación del gesto de su contexto para laudar sus "análisis", es más, lo determinan como índice objetivo para detectar una mentira. 

Es decir, "venden gato por liebre" al realizar estos análisis reduccionistas, que tanto mal le hace a la ciencia, sin embargo son tan populares -por ser deterministas-, que los invitan una y otra vez. Nuestra conclusión es que "lo que acepta la masa, no es por su verdad sino por su ignorancia", y por ese criterio se dejan llevar los productores de muchos programas de TV y radio.

Paul Ekman, psicólogo norteamericano de la Universidad de California, ha estudiado los movimientos faciales comprometidos en las expresiones faciales, que son producto de la información que se filtra por el sistema nervioso autónomo y se proyecta -ahora ya se conoce de manera objetiva- en el rostro de la persona, activando ciertos músculos de la cara, aparte de la información neuronal causada por los potenciales sinápticos y potenciales de acción de las células nerviosas, transformadas en neurotransmisores y comunicadas en la sinapsis que sostienen ciertos sistemas de interconexión célular.

Ekman señala que el mejor indice de mentira es la incoherencia del gesto facial con las palabras que se profieren, su gran descubrimiento fue la identificación de las microexpresiones, que son expresiones de 1/4 de segundo que la persona proyecta en el rostro de manera inconsciente, porque conscientemente lo desea ocultar. 
Muy aparte, tenemos los estudios kinésicos del lenguaje corporal, que no son exactos, simplemente señalan rasgos de la tensión o relajación que la persona puede sentir en ciertos contextos. La interpretación que encontramos en estos libros son interpretaciones propias del autor, no hay un estudio cuantitativo ni objetivo, por tal razón hay que tener mucho cuidado al aseverar ciertas cosas. 

En el pasado, por ejemplo, se tomaba a la frenología como la teoría verosímil para explicar el porqué de las protuberancias del cráneo, y concluía que se debían al uso de algunas zonas del cerebro que actuaban con respecto a la actividad mental de las personas, por ello se desarrollaban más que otras.

Aquello ha sido falseado desde hace mucho, se conoce que la actividad del cortex se produce en varias zonas del cerebro no en una sola, lo mismo sucede con la teoría interpretativa de la lectura del rostro, que lo encontramos en el libro de Rose Rosetree, fisonomista que tituló su libro "Leer el rostro", en donde presenta una teoría que es muy similar a la sostenida por la frenología, porque afirma que los rasgos físicos del rostro tienen que ver con las características de la personalidad, y que las acciones de las personas ante ciertos estímulos externos, dependen de dichos rasgos.

La ciencia de la mente se encuentra en la biología y neurociencia, por tal razón, muy poco en las ciencias sociales -lamentablemente- y se debe a este tipo de interpretaciones que se acercan a lo descabellado.

Con respecto a la mentira y su estudio, antes de traducir el lenguaje corporal de una persona, se debe reconocer la racionalidad de la misma, su contexto, idiosincracia, desarrollar empatía para identificar la intencionalidad, tal como lo dice Daniel Dennet: significa reconocer cómo actuaría uno mismo en dicho contexto; preguntarnos ¿Qué es lo normal en esta situación?, luego detectar las expresiones o microexpresiones faciales, identificar qué emoción siente en base a la conducta verbal y, como apoyo, el lenguaje corporal.

Unas piernas abiertas o cruzadas no nos dicen nada, NO SIGNIFICAN NADA, a no ser que estén acompañadas por gestos autoreconfortantes o la activación del músculo superciliar o AU4 o AU5 o el orbicular de la boca o AU23 o AU24, etc.

No se trata de adivinar o decir lo que se venga en gana, se trata de identificar lo que dichos indicios, NO AISLADOS, sino agrupados o acopiados, informan; porque siguen una secuencia lógica, es decir, están dentro de la interpretación de la emoción, cualquiera que sea. No es brujería, es ciencia.

En OVOCOMUNICACIONES sabemos hacer nuestro trabajo, y es una lástima que una periodista y otros seudo analistas se paseen por los medios de información (TV y radio) expresando tantas tonterías y falsedades, sólo porque hicieron un "seudo curso" en el extranjero sobre coaching del lenguaje corporal.

El siguiente video es de un programa argentino donde se presenta un antropólogo y comunicador estudioso de la divulgación de estos temas. Nos brinda un ejemplo positivo de alguien que habla con autoridad. Por lo poco que le escuchamos -porque no lo conocemos en el contexto peruano- es fidedigna la información que expone. Por eso subimos el video, porque vale la pena ver. La explicación que brinda sobre los gestos, se refiere a los emblemas, y vale aclarar que los emblemas tienen un significado cultural, no son de significados universales. Así que no se pueden aislar del contexto significativo ni de la idiosincracia de la persona.

Cualquier persona interesada en nuestros servicios, contáctenos.

FUENTE: www.youtube.com
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